Ir al contenido principal

Psicóloga Vecindario HERIDAS EMOCIONALES

Psicóloga María Jesús Suárez Duque

Psicóloga infantil, adolescentes, adultos y mayores

Atención psicológica individual. Terapia de pareja. Terapia de familia

PEDIR CITA


 Heridas emocionales o experiencias dolorosas de la infancia

Las heridas emocionales de la infancia son las siguientes (Lisa Bourbeau): 

1- El miedo al abandono

La soledad es el peor enemigo de quien vivió el abandono en su infancia. Habrá una constante vigilancia hacia esta carencia, lo que ocasionará que quien la haya padecido abandone a sus parejas y a sus proyectos de forma temprana, por temor a ser ella la abandonada. Sería algo así como “te dejo antes deque tú me dejes a mí”, “nadie me apoya, no estoy dispuesto a soportar esto”, “si te vas, no vuelvas...”.

Antecedentes:

Las personas que han padecido heridas emocionales del abandono en la infancia.

Tratamiento:

·      La herida causada por el abandono no es fácil de curar. 

·      Trabajar su miedo a la soledad

·      Trabajar el miedo a ser rechazadas

·      Trabajar las barreras invisibles al contacto físico

·      Hacer que los momentos de soledad desaparezcan.

·      Hacer que fluya un diálogo interior positivo y esperanzador.

2- El miedo al rechazo

El miedo al rechazo es una de las heridas emocionales más profundas, pues implica el rechazo de nuestro interior. Con interior nos referimos a nuestras vivencias, a nuestros pensamientos y a nuestros sentimientos.

Antecedentes:

En su aparición pueden influir múltiples factores, tales como el rechazo de los progenitores, de la familia o de los iguales. Genera pensamientos de rechazo, de no ser deseado y de descalificación hacia uno mismo.

La persona que padece de miedo al rechazo no se siente merecedora de afecto ni de comprensión y se aísla en su vacío interior. Suelen ser personas huidizas. Es probable que, si hemos sufrido esto en nuestra infancia, seamos personas huidizas. 

Tratamiento:

·      Trabajar los temores, los miedos internos y las situaciones que generan pánico.

·      Técnicas conductuales: arriesgar y aprender a tomar decisiones por sí mismo.

3- La humillación

Esta herida se genera cuando en su momento sentimos que los demás nos desaprueban y nos critican.

Antecedentes:

Podemos generar estos problemas en nuestros niños diciéndoles que son torpes, malos o unos pesados, así como aireando sus problemas ante los demás; esto destruye la autoestima infantil.

Las heridas emocionales de la humillación generan con frecuencia una personalidad dependiente.Además, podemos haber aprendido a ser “tiranos” y egoístas como un mecanismo de defensa, e incluso a humillar a los demás como escudo protector.

Tratamiento:

·      Trabajar la independencia, la libertad, la comprensión de sus necesidades y temores, así como sus prioridades.

4- La traición o el miedo a confiar

Antecedentes:

La herida de la traición surge cuando el niño se ha sentido traicionado por alguno de sus padres principalmente, no cumpliendo sus promesas. Esto genera una desconfianza que se puede transformar en envidia y otros sentimientos negativos, por no sentirse merecedor de lo prometido y de lo que otros tienen.

Haber padecido una traición en la infancia construye personas controladoras y que quieren tenerlo todo atado y reatado. Es probable que sienta la necesidad de ejercer cierto control sobre los demás, lo que frecuentemente se justifica con un carácter fuerte.

Estas personas suelen confirmar sus errores por su forma de actuar. 

Tratamiento:

·      Trabajar la paciencia, la tolerancia y el saber vivir

·      Aprender a estar solo

·      Aprender a delegar responsabilidades.

5- La injusticia

Antecedentes:

La injusticia como herida emocional se origina en un entorno en el que los cuidadores principales son fríos y autoritarios. En la infancia, una exigencia en demasía y que sobrepase los límites generará sentimientos de ineficacia y de inutilidad, tanto en la niñez como en la edad adulta.

Las consecuencias directas de la injusticia en la conducta de quien lo padece será la rigidez, pues estas personas intentan ser muy importantes y adquirir un gran poder. Además, es probable se haya creado un fanatismo por el orden y el perfeccionismo, así como la incapacidad para tomar decisiones con seguridad.

Tratamiento:

·      Trabajar la desconfianza y la rigidez mental, generando la mayor flexibilidad posible y permitiéndose confiar en los demás.

Es bastante común, por desgracia, que nuestra salud emocional esté dañada desde la infancia. A menudo no somos conscientes de qué es lo que nos bloquea, lo que nos da vértigo o lo que nos provoca temor.

En gran parte de estos casos, el origen está en lo aprendido cuando éramos niños, esas heridas que nos han ocasionado nuestras primeras experiencias con el mundo y que no hemos podido sanar.

Las heridas emocionales son experiencias dolorosas de la niñez que conforman nuestra personalidad adulta, quiénes somos y cómo afrontaremos las adversidades.

Debemos de hacernos conscientes de ellas y, por tanto, evitar maquillarlas, pues, cuanto más tiempo esperemos a sanarlas, más profundas se harán. El miedo a revivir el sufrimiento que nos causaron hace que nos pongamos cientos de máscaras que solo dificultarán nuestro movimiento por la vida. Eso es, precisamente, lo que tenemos que evitar.


Psicóloga en Vecindario

María Jesús Suárez Duque


Psicóloga infantil, adolescentes, adultos y mayores

Terapia de pareja

Terapia de familia


Tf 630723090


RESERVA ONLINE👍 

PSICÓLOGA ONLINE Y PRESENCIAL 

 

 

Atención psicológica en problemas de: 

Atención psicológica en:

 Atención psicológica en otros trastornos:

 

Precio 60 euros

Duración 1 hora

Pedir cita: 

Consultas

 

Psicóloga María Jesús Suárez Duque

C/ Tunte,6 Vecindario (Frente al Centro Comercial Atlántico, a la derecha de la oficina de correos)

Pedir cita: 630723090

https://www.psicologavecindariomariajesus.com/   

Comentarios

Entradas populares

Psicóloga Infantil Vecindario MUTISMO SELECTIVO: ¿QUÉ ES EL MUTISMO SELECTIVO?